Hablemos, escritoras. Blog

Un asomo a muchas cajas llenas de libros

Adriana Pacheco · 02/12/2022

Esta semana recibimos en Shop Escritoras dos cajas llenas de libros. Una llegó de Argentina de Alción Editora con los libros de una escritora a la que regreso continuamente y a quien dedicamos esta semana, Alicia Kozameh. La otra voló desde España con libros de editorales que ya son queridas amigas de nuestro proyecto como Candaya, Páginas de Espuma, Egales, Pre-textos, Pepitas de calabazas, y dos nuevos sellos que se suman: minúscula editorial y su traducción por Maia Figueroa Evans del libro Sabrina y Corina de Kali Fajardo-Anstine, así como la editorial española Muñeca infinita con otra traducción, la de Inés Garland de Las listas del pasado de una de las grandes colaboradoras de The New Yorker, Julie Hayden, quien murió muy joven y en el único libro que escribe hace una radiografia deliciosa y despiadada del New York de los 1970s. 

Hace no mucho llegó también otro cargamento, este vino de México, en el que le dimos la bienvenida a la gran Revista de la Universidad (UNAM), con su nuevo equipo dirigido por Guadalupe Nettel y colaboradoras como Yael Weiss, a quienes tuve el enorme gusto de entrevistar esta semana. Gracias a América Sánchez ahora tenemos el privilegio de venderla en los Estados Unidos. Llegó también en esa caja una original editorial, alacraña, así como los primeros avances de los libros que pronto irán llegando a Shop Escritoras del grupo editorial Penguin Random House con escritoras como Cristina Rivera Garza. No faltaron libros de nuestras queridas editoriales Paraíso Perdido, Sur+ Ediciones, Antílope, Era, Elefanta, UNAM, Dharma, y Bonilla-Artigas. 

En la misma semana recibimos otra más —esta desde acá mismo, Texas— con libros de FlowerSong Press y tres nuevas escritoras: Rebecca Bowman, Natalie Sierra y Leticia Urieta.  

Y lejos de querer hacer solamente una lista y presumir a nuestras autoras, sellos y títulos —cosa que por supuesto me encanta hacer— lo que quiero es dedicar este espacio para compatir parte de lo que veo cuando se tiene la gran oportunidad de reunir libros de ya pronto más de 50 sellos editoriales.

Así, a mirada de pájaro me encanta ver en el universo de la literatura contemporánea una presencia cada vez más fuerte de textos en donde la naturaleza ocupa un lugar central. Tal es el caso de Nuestra piel muerta (Paraíso Perdido) de Natalia García Freire, Hubo un jardín (Páginas de espuma) de Valeria Correa Fiz, o en Todo lo que crece. Naturaleza y escritura (Páginas de espuma) de Clara Obligado. Desde otro ángulo, el de la destrucción, está Proyecto Manhattan (Antílope) de Elisa Díaz Castelo, una obra que colecta las voces vinculadas a la creación de la bomba atómica. 

Otra es también la persistencia de la escritura de la extrañeza en escritoras como Ana García Bergua —otra deliciosa entrevista que ya viene en camino en Hablemos, escritoras— y sus personajes en Leer en los aviones (Era) o el cuestionamiento de la normalidad que crea en realidades sociedades anormales y hostiles como en el libro de María Bastrós, No era a esto a lo que veníamos (Candaya). Fuerte la propuesta para ver a una sociedad que dista mucho de ser justa desde la literatura lésbica como en los libros de Mila Martínez en Insurrectas (Egales) y Martha Lovera en Aquello que fuimos (Egales) ambas con una escritura muy íntima que muchas veces llega a la desolación del espacio que es continuamente negado. 

Las voces de las escritoras de origen hispano se levantan sonoras como en Lugar de aguas (FlowerSong Press) de Rebecca Bowman, y Sabrina y Corina (minúscula) de Kali Fajardo-Anstine, del que tuvimos el gusto de mandar 15 ejemplares a un Club de libro en Colorado.

Los libros gráficos, experimentales, ilustrados, vanguardista en su diseño, tema y forma son un campo que se debe explorar como en la interesante editorial alacraña y los libros Áak’ab el archipiélago de la noche, trotamundos. Tutú a donde el corazón te lleve, y Chet de Abril Castillo, así como Frontera interior de Astrid López Méndez y CONTRApunto I (Dharma) de Ingrid Valencia que explora las posibilidades de lo no lineal. 

Hay un continuo diálogo de obras que exploran una genealogía de mujeres, ya desde la ficción o lo autobiográfico como en la obra de Marina Closs con Tres truenos ahora en la edición de la editoriales Dharma (México) y Tránsito (España) y un libro ya clásico Primera Persona (Tránsito) de Margarita García Robayo. 

Buenos, pues hay mucho más que explorar, pero por el momento les dejo esta probadita para abrir apetito y ...

buen provecho.